Entre la docencia y mi profesión

En este aspecto, considero no tener problemas con el perfil de ser docente, debido a que he tomado cursos de preparación centrada en esta hermosa profesión.
Cuando decidí ser docente, estaba bien cierto y seguro de lo que seria como profesionista, aunque la formación se fue dando poco a poco, nunca hubo flaqueo en el tránsito por el transcurso de los años.
Cuando fui docente de una escuela secundaria para dar clases de computación a los alumnos de tercer año y donde actualmente trabajo; pienso que es diferente la forma de trabajo a los alumnos del nivel medio superior. Siento que la madurez con que aprenden los alumnos de este nivel va modificando la conducta y el perfil poco a poco, esto debido a que cuando ingresan es de una edad de quince años siendo muy jóvenes y cuando egresan, después de tres años, son ya unas personas adultas jóvenes con un criterio más definido, con toma de decisiones.
Considero que parte de esta labor es la formación, no solo de conocimientos, sino también de valores y que permite desarrollarse como un ser con aspiraciones y metas definidas y alcanzables.
Siempre es grato y reconfortante el saber que uno participa en entregar a la sociedad personas que se integran al sector productivo de manera eficiente y con un nivel cultural que le permite crecer en todos los ámbitos.
Me faltan unos cuantos años para jubilarme, pero en tanto seguiré esforzándome por dar la parte que me corresponde a mi profesión y la actualización es una de ellas.
Veo una escuela con mayor calidad, también veo a muchos jóvenes preparándose para conducir este país que nos ha dado mucho.

GRACIAS

ANTONIO DEL ANGEL RAMOS